domingo, 19 de julio de 2015

Hola mi amor, así solíamos llamarnos, te he echado de más, he quitado recuerdos para poder sobrevivir, he aumentado las ganancias para poder pagar por el alquiler de tu amor, le he restregado al olvido que aún te recuerdo y que vives en mí como un mal habito, que me he fumado tu adiós y he callado lo libre que me siento al no tenerte. He conseguido placer en los más mínimos detalles que no solías darme pero con mucho esfuerzo conseguí librarme de tu ausencia. Me tatué tu palabra favorita en mi lengua y me perforé en la oreja tu cinismo para siempre tenerlo presente. Sí, mi amor aún llevo algo de ti conmigo y esa historia de amor incandescente en medio de tanta obscuridad,  no logro saber si aún te quiero tanto o si aún te odio más, es esta incoherencia digna de ti, y tan vaga en mí. 

Aún recuerdo tu cara pero juro que olvidé tu voz, lo único que medio conservo es tu risa, tu risa loca, tu risa enamorada, algunas veces tan sarcásticas como tú y tu risa extraña en medio de una noche fría, de resto parte de ti se lo llevo el tiempo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario